19.1.09

Que diez años no es nada.

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Qué bueno es escuchar a Sabina ahora, que ha pasado el tiempo.
Y ya Sabina no tiene el rostro y las facciones de ese villano, ruin, despreciable, mujeriego y seductor, amor adolescente.
Cuantas almohadas mojadas escuchando como justificaba al responsable de las canillas de mis ojos.
Y amándolo por lo bien que contaba las cosas que suenan tan bonito al oído femenino.
Y odiándolo porque sus versos eran un buen argumento y una mejor excusa.

Que bueno que ahora Sabina, sea tan solo Joaquín Sabina.
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3 comentarios:

Il Capo dijo...

¡Ouch!

Que vuelva No music, no life...

Candelaria dijo...

..y si, no es mala idea.
La abstinencia provoca éstos refrites.

Y lo banco a Joaquinito, eh?

Claire Mandarina dijo...

¿Acaso todos tenemos "una persona" a la cual nos referencia escucharlo a Joaquín? Siempre es la persona que nos lo hizo escuchar o la persona a la que se lo hicimos escuchar. Pero siempre está...


Aunque parece que puede irse.